El romero, además, es una planta de gran valor culinario por el sabor y aroma que aporta a los platos de carnes asadas al horno, pescados a la brasa, relleno para el pollo a la cazuela… bastará añadir una ramita de romero. En medicina tradicional el romero lo podemos encontrar en forma de aceite o de alcohol para aplicarlo de manera externa sobre la piel. En ningún caso hay que ingerirlo.
Usos terapéuticos
El alcohol de romero tiene un uso tópico, en forma de masaje, y sirve para tratar las siguientes dolencias:
Dolores articulares y musculares
Dermatitis (sin herida)
Piernas pesadas
Pies cansados
Dedos o extremidades con hinchazón por cauda de gota o ácido úrico alto
Hematomas, torceduras y golpes
Picaduras de mosquito
Dolor de ciática
Catarro
Para masajes en casos de mala circulación y celulitis
Caspa y debilidad capilar.
Preparación
Para elaborar el alcohol de romero será necesario proveernos de un bote donde macerar la mezcla y unos frascos, a ser posible oscuro para proteger el alcohol de la luz. Durante el proceso de maceración es preferible, también, guardarlo en un lugar fresco y seco y alejado de la luz solar
-Varias ramas de romero
-Alcohol etílico de 96º
-Un bote o frasco de cristal.